25 enero 2007

Se está calentando La Tierra

Caricatura Luís Velásquez

* Venezuela contribuye apenas con el 0,48% de las emisiones totales de Dióxido de Carbono (CO2) en el mundo, uno de los principales gases de efecto invernadero causante del cambio climático

No es nada alentador iniciar un nuevo año sabiendo que el tiempo en el planeta se está acercando cada vez más al desastre ambiental y al Apocalipsis nuclear, según las advertencias de un grupo de destacados científicos dadas a conocer esta semana mientras adelantaban las manecillas del llamado “Reloj del Juicio Final”, instrumento creado para recrear un posible “Armageddon” mundial. “Los peligros que plantea el cambio climático son tan sombríos como los que plantean las armas atómicas”, sentenció la organización de científicos con sede en Europa fundada en el año 1945 bajo el nombre de Bulletin of Atomics Scientists. Actualmente, esta organización enfoca sus estudios “hacia las amenazas creadas por el hombre contra la supervivencia de la civilización humana”, entre las que destaca el cambio climático como “la mayor amenaza para el planeta”, según declaraciones de uno de sus miembros, el reconocido matemático Stephen Hawking.
Mientras el “Reloj del Juicio Final” indica que sólo faltan cinco minutos para la destrucción del planeta… ¿Qué acción emprende Venezuela contra el cambio climático?

DOBLE VULNERACIÓN
Aunque Venezuela contribuye apenas con el 0,48% de las emisiones totales de Dióxido de Carbono (CO2) en el mundo (uno de los principales gases de efecto invernadero causante del cambio climático), según señala el Inventario Nacional de Emisiones de 1999, las posibles repercusiones de este cambio global del clima sobre el país están reflejadas en la Primera Comunicación Nacional sobre Cambio Climático, elaborada por el Ministerio de Ambiente (MinAmb) con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo y el Fondo para el Medio Ambiente Mundial. El documento señala que Venezuela es un país doblemente vulnerable: “lo es tanto a las consecuencias potenciales del cambio del clima, como a la posible disminución de la demanda petrolera resultante de las políticas y medidas que se adopten para la reducción de emisiones”. En tal sentido, Venezuela reclama “ayuda para la diversificación de su economía, mediante la facilitación de conocimientos, transferencia de tecnología y mejoramiento de la capacidad de sus instituciones. Para Venezuela este tema es de gran importancia”.

MANIFESTACIONES QUE ALARMAN
Revela el informe que los efectos del cambio climático ya se han venido manifestando en el país: “Durante el siglo XX, la temperatura nocturna del país aumentó a razón de 0,37ºC cada 10 años y la lluvia en general disminuyó cerca de un 30%”. De igual forma, recoge los pronósticos de los expertos que consideran “más plausible que hacia el 2050 la temperatura media del país aumente entre 1ºC y 3ºC y en consecuencia, llegará a ser mayor a 28 ºC en gran parte del país. También se estima plausible que disminuya la precipitación entre 5% y 20%, especialmente entre junio y diciembre desde el Delta hasta Los Andes, aunque en algunos lugares pudiera aumentar”. De ocurrir este incremento en la temperatura media del país, el informe avizora pérdidas de producción animal y vegetal.
“La superficie del país con clima seco crecerá alrededor del 10% y los embalses allí situados disminuirán su nivel de agua, y aumentará la frecuencia e intensidad de las sequías. Los rendimientos de maíz, arroz y caraota pueden disminuir hacia el 2050 entre 5% y 10%, y localmente el rendimiento de los cultivos de caraota pudiera reducirse hasta en 40%. Más del 70% del rebaño porcino nacional y más del 60% de los pollos de engorde se concentran en zonas ya hoy en día muy calientes de Carabobo, Aragua y Miranda, por lo que se esperan reducciones significativas de producción e incremento de la mortalidad de pollos por olas de calor (Foto Reuters). El país cuenta con una gran extensión de selvas y humedales que pueden ser afectados, gran parte de la infraestructura turística está en zonas costeras bajas y, como país exportador de petróleo podemos vernos afectados por la caída de la demanda de hidrocarburos que puede ocasionar la reducción de emisiones en el mercado petrolero internacional”.


CAUDALES DE LAS CUENCAS
Para el investigador del Instituto de Ciencias Ambientales y Ecológicas de la Universidad de Los Andes, Rigoberto Andressen, el 75 por ciento de la hidroelectricidad proviene de los sistemas instalados en las cuencas de los ríos Caroní y Caura, 17% se hace a través de los sistemas instalados en Los Andes y 8% en la región de la Sierra de Perijá; y las reducciones en la precipitación -como las señaladas en los escenarios antes indicados- “podrían afectar los caudales de las cuencas en las que se encuentran instalados estos sistemas hidroeléctricos”. En la foto se observa la principal represa de Venezuela, Guri, ubicada en la cuenca del río Caroní en el estado Bolívar, al sur del país.

ACCIONES PARA MITIGAR
Entre las principales líneas de acción definidas en la Comunicación Nacional para el Cambio Climático se encuentran:
1. Concientización a todos los niveles Es necesario lograr un amplio conocimiento de la presencia del cambio climático como fenómeno que nos afecta a todos y en todos los niveles. Las comunidades deben estar informadas para sensibilizarlas sobre los cambios climáticos que están ocurriendo o pueden ocurrir en un futuro próximo, y disminuir las vulnerabilidades de territorios y comunidades.
2. Fomento de la investigación orientada a la toma de decisiones. Este lineamiento se refiere a la necesidad de estimular la investigación orientada a darle soporte a la toma de decisiones relativas a la adaptación y a la mitigación. En los diversos sectores (agrícolas, recursos hídricos, energía, etc.) se necesitará inversión en tecnología para desarrollar las medidas de adaptación.
3. Potenciación de la capacidad del país para percibir y responder a los efectos del cambio climático. Es necesario impulsar el desarrollo de todos los sistemas que actúan como sensores para dar información sobre aspectos climáticos y evaluación de recursos costeros, calidad de agua, etc.
4. Desarrollo de la participación, la gestión y la protección ambiental. Para enfrentar el tema del cambio climático se requiere de un gran esfuerzo que debe incluir la participación de instituciones y comunidades, con una organización que la favorezca, dentro del marco institucional de seguridad de la Nación, que incluya los aspectos relativos a la protección ambiental.
5. Ampliar y Fortalecer el saneamiento y control de ríos y cuencas. Los planes tradicionales de conservación de cuencas deberán ajustarse a los cambios en el funcionamiento hídrico, o ejercer medidas que puedan significar mantener un patrón de sistema hídrico similar, como trasvases, o aprovechamiento optimizado del recurso agua ajustado a las condiciones del cambio climático.
6. Garantizar el desarrollo de la seguridad alimentaria. Este lineamiento está orientado a tomar medidas de adaptación al cambio climático que tiendan a elevar el nivel de seguridad alimentaria dado el carácter estratégico que representa para el Estado y la sociedad.

La Primera Comunicación Nacional de Venezuela sobre Cambio Climático hace un llamado a la población a estar atentos a las decisiones que adopte el Estado, en cuanto a la mitigación de las emisiones y a la adaptación al cambio climático.